Por:

 Marcela Fonseca Martínez/elpost.

Caballos de dulce, acero, fuego, madera, vidrio, flores, tierra, piedra, hielo; caballos eléctricos, estelares, quijotescos, con armadura, con pinta de Ferrari, con recortes; azules, verdes, rojos, amarillos…

Desde el 12 de julio, y hasta el mes de septiembre los bogotanos y visitantes de la capital colombiana podrán disfrutar de todos estos especímenes, ubicados en el Parque de la 93 y otros sectores de la ciudad. Esta exposición llamada “Equus Arte: Una leyenda que construye esperanza”, es la III Temporada de Arte en espacio público que convocó la Fundación Corazón verde, entidad sin ánimo de lucro, creada en el año 1998, con el propósito de ayudar a las familias de policías caídos en el cumplimiento de su deber. Reconocida también por campañas como “ArborizArte” y “AnimArte”, que en años anteriores adornaron la ciudad con árboles y mariposas para el mismo fin. La inauguración de Equus Arte se realizó en la Plaza de Bolívar y contó con una muestra de equitación renacentista denominada “Alta Escuela” con caballos traídos de Argentina y realizada por los miembros de la Escuela de Carabineros de la Policía Nacional de Colombia. Toneladas de arena y graderías transformaron la plaza en un campo de equitación por algunas horas.

Esta exposición cuenta con 74 caballos de tamaño natural en yeso y metal decorados por 75 artistas nacionales, la cual concluirá con una subasta de los mismos. Además, se contó con la colaboración de la Casa Christie´s de Nueva York para su realización. En esta muestra los ciudadanos podrán ver obras de arte totales, donde se plasma a través de distintas técnicas el rechazo a la violencia y el conflicto existente en nuestro país. Caballos como el Rey de los Andes de Carlos Santa Cruz, basado en la cultura precolombina Kiyasinha, o el de Danielle Bessudo en honor a las mujeres de Barú decorado con conchas y estrellas imitando un vestido de baño llamado Estrella barulera, hacen un homenaje a estas culturas y las plasman en estos nobles animales, dejándola eternizada en el tiempo.

Asimismo, las obras de Germán Londoño, Caballo colombiano, y el de la Fundación +Arte – Minas, Mensajero de paso fino, muestran el dolor de un pueblo a través de las manos plasmadas con los colores de nuestra bandera, con una muleta y mensajes de las personas, simbolizando los miles de compatriotas que han sido víctimas de las minas antipersona. Otros son más curiosos, como el de Mauricio Zequeda, Galopando mares, o el de Hernán Díaz, Memorabilia, donde se encuentra desde el David de Miguel Angel, hasta el ex alcalde Antanas Mockus.

Por otro lado uno de los que más sobresalientes es Miserére de Joaquín Restrepo, que haciendo alusión a su nombre se encuentra en posición reverencial clamando por piedad.

 Asimismo, el de Lorenzo Castro Jaramillo, llama la atención de las personas por la técnica utilizada, vidrios que vistos en perspectiva muestran un caballo negro. También lo hace Guernica, el caballo de Consuelo Gómez, alusivo a al gran obra de Pablo Picasso. Y el que más adeptos tiene por ser diferente a los otros es el Centauro de dos caras de Augusto Rendón o también llamado Hipocresía, pues muestra como este monstruo salvaje de la literatura griega toma la cabeza del caballo en señal de triunfo. Así también, artistas como David Manzur, Germán Tessarolo, Omar Rayo, Adriana Vásquez, Jaime Arango, María de la Paz Jaramillo, León Trujillo, Santiago Uribe, Jorge Maryaroff, Jorge Cavelier, Teye, Martha de Correa, Vejarano, Catalina de Greiff, Luis Luna, Antonio José Caro, entre otros, se unieron a esta causa y plasmaron su arte y técnica en estos animales. Los turistas y nativos podrán gozar de este tipo de arte, original y dinámico, que cualquiera puede apreciar. Así que los invitamos, aún quedan dos meses para gozar de esta propuesta que engalana la capital bogotana sin ningún tipo de requisito.

Viernes , 12 de Julio de 2007 / COPYRIGHTS ® 2007 ® Latin American Post